Me gustan mucho los girasoles, siempre son decorativos, y tan alegres como la portadora del abanico, Mari Carmen. Escogí ésta flor precisamente porque cuando me hablaron de la chica que lo iba a llevar, de momento la identifiqué con ellos. Sobre fondo rojo resaltan mucho.
Más girasoles, sobre un fondo ésta vez más granate, también quedan preciosos, disfruté mucho haciendo éste abanico para Mariceli, de Jauja. Que lo disfrutes!
A Isabel le apasionan los caballos, así que la sorprendí con éstos de tiovivo sobre fondo propio del abanico, sin retocar. Quedó encantada.
Las calas, tan queridas para Diego Rivera y la pintura mejicana, son tan agradecidas de pintar que es un verdadero goce.
Éstas mariposas de Manoli van a clase de baile con ella, pero no salen volando porque van como anillo al dedo con su dueña. El fondo en verde manzana evoca la naturaleza en la que se mueven éstos insectos tan decorativos.
Ésta mariposa quedó dignísima sobre fondo negro. Elegancia y delicadeza.